INFANTIL

DESCUBRIENDO LA REALIDAD

Educación Infantil abarca de los 3 a los 6 años. El niño comienza a descubrir quién es, sus deseos y necesidades más profundas, al tiempo que descubre al otro y comienza a interesarse por la realidad, a expresarla y a conocerla. Para guiarle en su aprendizaje, nuestra metodología parte de la observación de la realidad y de su manera de conocer. El maestro se interesa por conocer al niño y entender cómo piensa, por qué tiene dificultad para hacer ciertas cosas, por qué se enfada, por qué se ríe y, en definitiva, cómo se relaciona con la realidad para que su intervención sea cada vez más adecuada. En Infantil, es común a los niños:

  • Tener una curiosidad innata que ha de ser educada y encauzada, y para ello necesita de un adulto que mire la realidad y que se sorprenda con ellos para que empiecen a descubrirlo todo: cómo es, para qué sirve, qué tiene que ver con ellos, cómo lo pueden usar adecuadamente.
  • Acercarse a la realidad de forma globalizada para conocerla (al contrario que los adultos, que tendemos a conocer fragmentadamente), e interrelacionar mecanismos afectivos, intelectuales, expresivos, psicomotores. Por esta razón, el campo más favorable de experiencias y conocimiento es la vida cotidiana, las relaciones con sus compañeros y los adultos… 
  • Comenzar a descubrir la realidad a través de su actividad física: su pensamiento coincide con su acción. Solo a través de ella comienzan a imaginar, a pensar, a regular su conducta a comprender el mundo y sus relaciones a través de la imitación y las representaciones mentales de lo vivido.

Por todas estas razones, el juego es el principal recurso educativo que utilizamos: juego libre, juego reglado, juego individual y, sobre todo, en su dimensión social.

Queremos comunicar a los niños que la vida y ellos mismos son un regalo, y a través de nuestro trabajo les enseñamos a mirar todo desde esta certeza. Estamos con ellos ayudándoles a razonar las cosas, a observar qué les hace estar contentos o tristes, etc. Sus límites no son la última palabra, sino ocasión para educar y crecer”. 

OBJETIVOS

La finalidad educativa de esta etapa es favorecer en los niños su autonomía, el uso de la razón, la seguridad en sí mismos, la conciencia de sus posibilidades, la creatividad, la responsabilidad, la sociabilidad y el deseo de saber y conocer. Lo hacemos proponiéndoles experiencias que favorezcan el conocimiento de la realidad y de sí mismos y desarrollando sus capacidades físicas, cognoscitivas, sensoriales, afectivas, expresivas, sociales, morales y críticas, de forma que puedan empezar a ser conscientes de lo que es bueno, bello, verdadero y les hacer estar contentos.

Esta apasionante aventura del conocimiento no podrían realizarla sin un adulto que propone, sin alguien que guía, que no sólo indica el camino a recorrer, sino que se implica acompañándoles en ese proceso, provocando la libre iniciativa del alumno a la hora de arriesgarse a conocer, permitiéndoles descubrir la realidad como si la reinventasen. El adulto favorecerá que el niño se mueva con autonomía y responsabilidad, que experimente, se relacione, se exprese sin miedo a equivocarse o a ser corregido, respetando sus tiempos y ritmos, y ayudándole a sacar a la luz todo aquello que el niño es, tal como es.

Siempre dentro de una relación afectiva con el maestro que le haga sentirse querido, acogido, perteneciente a un lugar y protagonista de su historia.

METODOLOGÍA

La realidad es el método educativo por excelencia en esta etapa. Los contenidos curriculares se plantean de forma global por medio de actividades que despiertan su interés a partir de situaciones de la vida cotidiana, fomentando la dimensión social, en un ambiente de afecto y confianza y articulándose en unas estrategias metodológicas:

  • Importancia de la rutina: 

    La vida cotidiana es el lugar privilegiado para aprender. Por eso establecemos una rutina diaria, imprescindible para que los niños se muevan con seguridad, aprendan a anticipar, a convivir, a crear hábitos de autonomía y responsabilidad, desarrollen la estima de sí mismos y la valoración de los demás. Las actividades y hábitos que se trabajan están secuenciados para cada edad y momento del curso: empezamos el día con la asamblea en el tatami, lugar común donde se comparten intereses y actividades del día. Seguimos con el juego por rincones, la música, el inglés, la psicomotricidad, el patio, el comedor y la siesta (para los más pequeños). “Porque tengo sed, me intereso por saber dónde están los vasos y aprendo a abrir y cerrar el grifo. Porque quiero jugar a rincones, aprendo a reconocer mi nombre en el carnet”.

  • Los proyectos:  Son un recurso organizado para dar forma al natural deseo de aprender de los niños. Surgen de su interés y sus conocimientos previos puestos en común con su grupo y se desarrollan a partir de “lo qué queremos conocer”. El maestro valora todas las aportaciones, recogiéndolas y ordenándolas, y provoca su razón con preguntas. De este modo se les introduce a los niños en un deseo de conocer, implicarse e investigar acerca de distintos ámbitos de la realidad, épocas históricas, fenómenos fí sicos, etc… El aula se convierte en lugar de trabajo, de crecimiento de las personas, donde el maestro propone, los niños aprenden con sus aportaciones, las de los compañeros y gracias a las cosas que construyen juntos día a día.
  • El trabajo por rincones.

    El juego es el modo privilegiado de los niños de acercarse a la realidad, de aprender e interactuar con los otros. Esta estrategia favorece la libre iniciativa, la conciencia de lo que se está haciendo y la responsabilidad, porque se elige en relación al maestro y a unas normas, y siempre en relación con otros niños. Permite al maestro atención personalizada y en pequeños grupos, adaptando fácilmente los materiales al momento evolutivo de cada uno. Cada espacio lleva implícito el sentido que ti ene cada cosa y los ámbitos del currículum que prioritariamente se trabajan.

    • Tatami/Construcción: en este lugar construyen estructuras horizontales, verticales, simétricas, que permiten manejar y resolver problemas espaciales, de equilibrio, agrupar, comparar, ordenar y relacionar propiedades de los objetos.

    • Biblioteca: un espacio para trabajar el lenguaje oral a partir de definiciones, poesías, canciones, retahílas, juegos con palabras y sílabas. Se introduce también el lenguaje escrito y el gusto por la lectura mediante los cuentos en español e inglés.

    • Juegos de mesa: en este rincón trabajan la memoria, la atención y conceptos matemáticos relacionados con la numeración, la clasifi cación, la seriación, etc. Está siempre implícito el control de la conducta indispensable para respetar las reglas, los turnos de juego y la resolución de conflictos

    • Plástica: este rincón desarrolla la creati vidad y las habilidades motrices básicas a través del uso de materiales artí sti cos. Contribuye a facilitar la representación del conocimiento y de las vivencias adquiridas

    • Juego simbólico: se recrea, dentro del aula, una zona relacionada con el proyecto: una cueva prehistórica, una casita de cuento o un barco pirata… En su interior, los alumnos juegan a adoptar roles, lo que favorece la comprensión del significado de las cosas más abstractas y propias del hombre: el miedo, la generosidad, la valentía, el peligro, la obediencia o el cuidado de los otros. Todas ellas se practican en este rincón de manera simbólica, facilitando la socialización, la asimilación de la realidad y las propias vivencias y contribuyendo a la construcción de la propia personalidad.Construcción: en este espacio se desarrolla la motricidad fi na, que será básica para el futuro desarrollo de la escritura: la prensión, el agarre y la agilidad en dedos y mano. Los alumnos adquieren destrezas en el manejo de elementos muy pequeños, como animales y piezas.

    • Visoconstrucción: un lugar para copiar modelos, lo que favorece la integración del sistema visual y el manipulativo. Se desarrolla la capacidad de reproducir lo que se ve

Inglés

El objetivo en Infantil es que los niños se desenvuelvan en inglés en situaciones cotidianas, siempre en la medida de sus posibilidades. Se crea un clima y un contexto que suscita el interés de los alumnos por el uso del idioma. La música, los cuentos, los juegos y representaciones ayudan a adquirir nuevo vocabulario, a desarrollar la comprensión, el oído y la expresión, siempre en un contexto apropiado al momento evolutivo del niño. Las profesoras hablan únicamente en inglés desde el primer curso de infantil, tanto dentro como fuera del aula, lo que hace que la utilización del idioma sea indispensable para los niños.

Psicomotricidad vivenciada

La actividad física es necesaria en el niño para poder experimentar y dominar el cuerpo, y es fundamental para construir el pensamiento y autorregular las emociones. La psicomotricidad vivenciada parte de la competencia motora de cada uno, fomentando la confianza en sus posibilidades de movimiento y favoreciendo un mejor y mayor desarrollo de la unidad mente-cuerpo. El educador, en constante observación, permite que el niño exprese el movimiento con libertad y le ofrece materiales específicos, para que a través del juego y la relación con los demás vaya afrontando retos que contribuyan a su desarrollo personal.

FAMILIA

La familia en nuestra etapa es uno de los pilares educativos fundamentales. Cuando el maestro acoge a un alumno lo acoge con todo su entorno familiar y social y las experiencias que ellos le proporcionan.  Nuestra primera tarea es conocer a esta familia y establecer con ella vías de comunicación y colaboración que partan de una confianza mutua. Sin esta relación de confianza y “complicidad” no es posible educar a los niños. Por esta razón, planificamos espacios, tiempos e iniciativas muy variadas que favorezcan la colaboración, la implicación, la relación cotidiana y la información a las familias y un mayor conocimiento de nuestra propuesta educativa.

Se trata de ofrecer variedad de propuestas que acojan las posibilidades de implicación de cada uno. Así, las familias y los profesores tienen la posibilidad de relación diaria: a la salida y entrada de los niños en el colegio; entrevistas e informes trimestrales; siempre que se necesite por parte del maestro o de las familias, reuniones de aula; talleres de padres para construir material durante la jornada escolar o desde casa; participación en tardes de juegos de mesa en el aula, cuentacuentos, salidas extraescolares, teatros, representaciones, etc.

Sin la participación de las familias no sería posible llevar a cabo muchos de los proyectos e iniciativas educativas que diseñamos para los alumnos.

 

FONDO SOCIAL EUROPEO

Más información aquí.

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, estás aceptando el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. También puedes CONFIGURAR las cookies o rechazarlas.    Política de cookies
Privacidad